Consejos para Orar con DIOS

¿Qué es orar con DIOS?

orar es tener una conversación con DIOS, una comunión directamente con DIOS, es hablar completamente de todo lo que sientes, lo que te molesta, si tienes una meta muy importante, un nuevo proyecto en fin el ORAR es hablar abiertamente con DIOS.

La Oración es nuestra íntima comunicación con Dios, es la manera como le expresamos a Dios nuestros problemas o situación actual.
De igual forma es nuestra manera de agradecerle el haber cumplido una promesa o el habernos fortalecido en nuestro día a día o simplemente escucharnos. Como dice un lema por allí. No hay hijo de DIOS sin Oración.

DIOS nos da el privilegio de poder comunicarnos directamente con el en la Biblia podemos encontrar varios versículos que nos ayuda a entender mejor la oración y cada día acercarnos más a DIOS.

el libro de Jeremías 29:12: Entonces ustedes me invocarán, y vendrán a suplicarme, y yo los escucharé.

como iremos a DIOS, como le suplicamos, lo hacemos a través de la oración.

Dentro de la Biblia nos menciona algo muy importante es orar en todo momento, situación o circunstancia y nos menciona en Tesalonicenses:

Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús. (1 Tesalonicenses 5:16-18).

En este versículo nos menciona algo muy importante orar sin cesar  lo cual significa que no importa lo que estas haciendo, si estas estudiando, aseando, trabajando lo importante es estar en comunicación con DIOS.

DIOS nos solicita estar dedicados a la oración, quiero mencionarles que a través de la oración vamos aprendiendo a agradecerle a DIOS. 

Dedíquense a la oración: perseveren en ella con agradecimiento. (Colosenses 4:2).

Consejos Para Orar con DIOS

En San Mateo cap. 6  versículo del 6 al 13 nos da el mejor consejo de todos:

6Más tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

7Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos.

8No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.

9Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.

10Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.

11El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.

12Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.

13Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.